Bajo los lineamientos del presidente Nicolás Maduro y la coordinación de la vicepresidenta ejecutiva Delcy Rodríguez, el sector agroalimentario industrial nacional registra un nuevo avance con la reactivación de una de las fábricas de cereales más importantes del país.
En apenas tres meses de trabajo conjunto entre el Estado y la empresa privada, la planta ha logrado incrementar en un 50% su producción, consolidando una recuperación acelerada que garantiza abastecimiento interno y sustitución de importaciones en un rubro estratégico para la dieta venezolana.
El ministro de Industrias y presidente del Centro Internacional de Inversión Productiva (CIIP), Alex Saab, destacó que este esfuerzo constituye un ejemplo de la nueva etapa de cooperación productiva que vive Venezuela: “Esta planta de cereales es muestra de que la unión entre el Estado, el capital internacional y nacional, y los trabajadores, puede devolverle la fuerza a nuestra industria en tiempo récord”.
El proyecto cuenta con una inversión que supera los 10 millones de dólares, destinada a modernizar equipos, asegurar materia prima y fortalecer la logística de distribución. Estas acciones permiten proyectar que la fábrica cierre el año con más del 85% de su capacidad instalada en funcionamiento.

La recuperación de esta planta de cereales no solo representa un paso firme hacia la seguridad alimentaria, sino también un símbolo de la alianza productiva entre Gobierno, inversionistas y trabajadores que transforma la realidad industrial del país.